La IA ha tenido un impacto significativo en la odontología, especialmente en el campo de la ortodoncia. Una aplicación destacada es el escáner facial Metismile, desarrollado por Shining 3D Dental. Este escáner utiliza inteligencia artificial para analizar la cara del paciente y crear un modelo digital preciso en 3D. Esta información permite a los ortodoncistas planificar tratamientos personalizados de manera más eficiente y precisa.
El escáner facial de Metismile ofrece varias funciones, como la predicción del crecimiento facial, la medición de asimetrías faciales, el análisis de la sonrisa y la predicción de la posición final de los dientes después del tratamiento. También se puede utilizar para planificar el diseño de carillas dentales y otros tratamientos de odontología estética.
Además del escáner facial de Metismile, la IA se utiliza en otras áreas de la odontología. Por ejemplo, se utilizan algoritmos de aprendizaje automático para mejorar la precisión del diagnóstico y la eficacia de los tratamientos. Los ortodoncistas pueden utilizar la IA para analizar grandes cantidades de datos de pacientes y tomar decisiones de tratamiento más rápidas y precisas.
La IA también ha mejorado la fabricación de prótesis dentales y restauraciones. La impresión 3D se utiliza para crear coronas e incrustaciones personalizadas a partir de modelos dentales digitales. Esto proporciona una mayor precisión y una adaptación más precisa a la estructura dental del paciente. Además, el proceso de fabricación con impresoras 3D es más rápido y eficiente, lo que permite la fabricación de coronas e incrustaciones en una sola cita.
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